"Una dirección solo se puede blandir un arma... solo un motivo se apunta con un arma... solo con esos ojos determinados pueden decir donde queda clavado el filo del arma en manos..."
El primero filo fue aquella mirada que se cruzaron en la soledad... aquel entonces todo era ciego, ignorante, indiscutible y también misterioso. No había razones reales por la cual luchar, solo impulsos que llevaban a la resistencia.
No había fortaleza completa ni maldad fluida, solo era una mezcla completa de la existencia.
La primera señal de muerte... tantos años atrás fue por el exterior, razones propias para olvidar el porque se vive llevan a despertar dos fuentes... una personalidad distinta para cubrir esa herida y un enorme hueco en el pecho que jamas había sido notado ese tiempo... solo se sabia que había eso.
Los tiempos pasando, crecía dentro de ello una sombría apariencia que arrasaba con todo la alegría que se vivía dentro... consumiendo... desterrando... y maldición todo el pensamiento, a pesar de eso, resistió ante un sacrificio de su soledad, su única sensación que lo cuidaba (amiga imaginaria) acepto el destino de ser devorada por las sombras y dar tiempo para que creciera aun en un mundo seguro.
Esa fue... la primera vez que di el primer golpe.
Pasaron años hasta el día en que regreso aquel dolor... una tormenta de agonía donde todo era apartado y frió, ahí es cuando por segunda vez nuestras miradas se cruzaron... pero esta vez no eran los mismos ojos con los que nos vimos hace años. Ojos salientes como reptil, ojos de un débil y temeroso niño... desde lo mas solitario es donde nos vimos... atrapado y tu cerca... fue el primer encuentro que marco la guerra por el dominio del cuerpo... la adolescencia...
Etapa que dio a flote toda tu mente, despertó, saco, abrió y mas que nada... conecto toda esa timidez, ignorancia y pensamientos fuera de razón aun siendo verdaderas.
El tiempo fluyo rápido... y mi prisión también crecía como la fuerza fluida por todo el ser... mientras intentabas superar todo evento que tu vida acoso el dolor... así fue como una guerra interna comenzo a ser asfixiante... sin embargo, aquello que se interpuso... aquella imagen extraña puso una barrera que impidió el despertar... tiempo así... se duro el sello, impidiendo el desatar de la tormenta... aunque todavía las miradas podían cruzarse entre nosotros todavía como siempre... tanto esencia emanada como los ojos que miraban fuera... estaba todo conectado como uno...
El sueño pesado... varias personalidades tratando de imitarte e imitarme... no fueron mas que obstáculos para ti desde siempre... mas no rivales reales como debería ser... sin embargo algo descuidado fue que al albergar... un alma nueva donde el corazón broto en el interior de su hueco dio por sentado la rotura de las cadenas que aprisionaban aquella sombra que tanto le dolía recordar.... desde ese momento los ojos de un reptil que se cruzaban ahora, eran las miradas de la bestia mas temida de todo el pasado... ojos de un humano lleno de sed de sangre y odio.
Tantas batallas con tus personalidades... todas aquellas son solo imagenes de la original misma... que en realidad solo existían dos personalidades... y de ellas dos nacieron mas... seis mas de la cual solo cuatro surgen de la personalidad sellada... sellada en la soledad y dolor mientras las otras expuestas a la resistencia en busca de felicidad.... Ahora libre de tanto pesar... ojos vendados y cadenas alrededor es lo primero que se puede sentir y también una fuerte sensación a todo el alrededor donde la fuente tan grande de poder esta justo en el pecho vació... donde era lo que mas dolía... siempre dolía...
El reencuentro que creyó tener... era en realidad la primera vez que nos vimos como personas en dos imagenes, sin embargo, sorprenderse no era nada inquietante... nuestras almas mismas ya sabían como son formadas.
El tiempo fluyendo... hubo batallas en ellas... no siempre... solo fueron dos... de las cuales la primera era por el dolor que gritaba en el pecho y la segunda... fue el momento donde todo murió... tanto el mundo como las personalidades y resurrección de una nueva persona de el...
Su voluntad y deseos no eran tan fuertes como derrotar mi rabia... sin embargo, aquella... brisa que soplaba en sus labios... mirada expuesta para morir eran tan fuertes como el filo... tanto dolor abrasador en sus manos podía sentir en mi... como tanta alegría cubría y tranquilizaba su mente....
Todo ese tiempo que se creyó de mi como un ser malvado u oscuro... solamente soy lo que su corazón se pudrió...
La mirada que sus ojos me miran... nunca cambiaron... nunca buscando sangre gotear... nunca dolor gemir... solo buscando... "Aceptación", si, "aceptación" fueron sus únicas palabras cuando frente a mi se mostró con el corazón herido y agitado... sus inútiles palabras que tanto me siguieron frustrando... por no aceptar matarla... u olvidarla... por no terminar de una vez con el destino que su vida escribió... lo negó de nuevo, no con palabras, ni con el corazón, ni con el cerebro... fueron sus fuertes ojos que negaron... esos ojos llorones, de temor, sin coraje... estaban frente a mi de nuevo pero con una sola voz en la garganta... "Aceptar"... desenvainando mi espada directo a su pecho... el eleva su espada gruesa en dirección... misma... de ahí, dos armas directas solo pueden herir un solo punto y solo dos fuerzas del mismo poder pueden matarse...
Un día... tomo el día para que la batalla acabara... su pecho se agrieto y su cuerpo estaba lleno de heridas... pero no fue el único lastimado... en mi también, había recibido suficiente daño como para no poder caminar... antes de que hubiera sido derrotado... el se acerco y con la mirada firme... pude escuchar otra palabra que sus ojos nunca describieron...
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Herido... se torno la vuelta y camino... en dirección a la oscuridad...
No era la ultima batalla que tuviera... sin embargo, era una derrota que jamas podría recuperar ganando aun si dominara el cuerpo... aun si fuera el rey de todo el pensamiento de la persona... solo pude ver como... iba a cumplir su voluntad, cargando en brazos... aquella imagen que mis ojos nunca vieron con claridad...